Las personas envejecen de múltiples maneras, dependiendo de sus experiencias y de los eventos y situaciones afrontadas durante sus vidas. El envejecimiento es un proceso gradual en el que influyen factores como la genética, el medio ambiente, el estilo de vida y la atención médica.
En general se distinguen tres etapas en el proceso clínico del envejecimiento:
- Madurez avanzada: entre los 45 y los 60 años
- Senectud: entre los 60 y los 75 años
- Senilidad: más allá de los 75 años
El inicio de estas etapas coinciden con lo que plantea el gerontólogo ruso y doctor en Ciencias Biológicas, Alexéi Moskalióv. El mismo afirma que el primer momento en que un ser humano no puede discutir con la naturaleza es a los 45 años, luego de haber completado la función reproductiva.
El siguiente sucede a los 60 años, cuando se ve afectado el mantenimiento de las funciones vitales. Esto se debe a que la división celular y la regeneración de los tejidos se
. A esa edad padecemos de tres enfermedades crónicas como promedio.El último momento es a los 75 años. A esta edad suceden cambios que afectan a los órganos en especial el cerebro. Ya para ese entonces estaremos padeciendo hasta siete enfermedades crónicas. Moskalióv precisa que estas son cifras promedio, que dependen en gran medida del estilo de vida de la persona.
Alexéi Moskalióv, es un especialista del Instituto de Biología del Departamento de los Urales de la Academia de Ciencias de Rusia. Sus estudios genéticos fueron impulsados por el fondo ruso La ciencia por la prolongación de la vida, creado para el desarrollo de las investigaciones destinadas a la elaboración de métodos para prolongar la vida.
Según este experto en la materia: «El organismo vivo es capaz de reparar él mismo el ADN, pero con la edad las alteraciones se acumulan y provocan varias enfermedades asociadas con la vejez». Y, «cualquier persona tiene la capacidad de controlar la duración de su vida, independientemente de los genes de los que dispone». Para lo cual es importante diagnosticar a tiempo las enfermedades crónicas, seguir una dieta saludable, entrenamiento físico, manejo del estrés. En fin, que «la prevención es el mejor tratamiento».
Los fundadores de la organización están seguros de que la vida humana puede durar entre 140 y 150 años. Los estudios se desarrollan en varias direcciones, desde la creación de pastillas que podrían suministrar a las células envejecidas las sustancias necesarias para rejuvenecerlas, hasta la manipulación del genoma, que con la edad requiere ser reparado.
Otro gerontólogo dedicado al estudio del proceso de envejecimiento es el doctor Michael Roizen, presidente y director del Centro de bienestar de la Cleveland Clinic. Elaboró un programa antiedad, al que denominó «Edad Real». Este permite calcular fácilmente la edad biológica de cada persona y también descubrir cuál es el mejor camino para revertir la trayectoria del envejecimiento.
Se debe tener en cuenta también a Aubrey de Grey, gerontólogo e informático. Este científico trabaja en el desarrollo de la senescencia negligible ingenierizada, una estrategia de reparación de tejidos que rejuvenecería el cuerpo humano y por lo tanto permitiría una esperanza de vida indefinida. Para conseguir esto, ha identificado siete tipos de daños a tejidos causados por el envejecimiento que deben ser reparados médicamente antes de que este objetivo se pueda alcanzar. Este es un «hombre contra el tiempo» y el objetivo de su investigación es conseguir un cuerpo duradero, que nunca se deteriore.
Mientras los científicos de todo el mundo investigan cómo frenar el envejecimiento, cada quien puede hacer lo que esté a su alcance en estos momentos. Teniendo presente que nuestra edad, la «real», tiene que ver con factores que podemos controlar, como lo que elegimos comer, si fumamos o no, si nos ejercitamos físicamente, etc. Si eliges vivir mejor, vivirás más tiempo, con más energía, y con mejor salud.